Y al final...
El sol habló, la luna habló, el mar habló, las estrellas hablaron, las montañas hablaron, los árboles hablaron, la lluvia habló.... todos con un mismo objetivo, todos diciendo lo mismo. A pesar de sus diferencias, todos se pusieron de acuerdo en decir lo mismo. No pudimos contestar, no había más que decir.... callamos y nunca más volvimos a emitir ninguna palabra...