Un día, quizás
Allí intento ir, esa mirada es mi faro, mi tesoro escondido. Apenas tengo una luna, un par de estrellas que me sirven de escasa guía y un mapa que todavía no tengo en claro si tiene el amor tachado con una cruz o si la X indica dónde debo hallarlo. Seguiré caminando, buscando rumbos, navegando día y noche y quizás un día me zambulliré y cuando suba a respirar nuevamente, mis pulmones se inunden de vos.