Ya el otro día hablé del recital que hizo el Flaco, pero hay otro recital en sí mismo que es único: el recital de la gente. Todas las edades, chicas con sus novios, madres enamoradas, flacos filósofos, pensadores fumados, fumados pensadores, viejos amantes del rock nacional que lo sigue desde hace más de 30 años... en fin, un conglomerado humano de características zoo-lógicas. Antes y después del recital, en el camino de ida y en el de vuelta, uno pude escuchar frases, metáforas y teorías de todo tipo. El otro día, la que más me gustó fue esta: Recién cuando te mueras, vas a ser vos mismo... No me gustaría estar en las ojotas del interlocutor.