Viejas líneas

El hilo de tu savia agita

la dulce nieve en que naufragás

Un perro muerde sin prisa

el hueso roído por la humedad


Y al cerrar los ojos

La vida gira en laberinto

Se mezcla Villa Crespo

con Bangladesh y el limbo.


Un gusano sin tiempo

La pantalla te trae por un segundo

une mundos de sueños

y volás en hoja sin rumbo


Tu universo paralelo ligado

por las líneas viejas de Entel

Que te acercan en un instante

cuando el sol murió y ya no hay té.


Te charlo un invierno sin piel

en la lejana Troya sin sorpresas.

Bizcochos que dejan el agridulce

sentido de encontrarte y que no seas ella.

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